30 de abril de 2015

CESAR ALVAREZ ES ENTREVISTADO EN PENAL


El próximo 16 de mayo, el expresidente del Gobierno Regional de Áncash César Álvarez cumplirá un año preso en el penal de Piedras Gordas, en Ancón, acusado de ser el autor intelectual del crimen de su exconsejero y rival político Ezequiel Nolasco, quien fue asesinado en marzo de 2014.

En estos meses de reclusión, Álvarez dice haber perdido 30 kilos de peso. La ropa le baila. Atrás quedaron los tiempos en que usaba ternos a medida y calzado italiano, cuando era el todopoderoso presidente de la región más rica del país.

La revista Correo Semanal lo entrevistó en su celda del área de prevención, que es la zona más segura dentro de esta cárcel de máxima seguridad.

César Álvarez comparte camarote con José Luis Roque Alejos, “Cholo Payet”, condenado por el homicidio del hincha aliancista Walter Oyarce. Otros compañeros de pabellón son el expresidente regional de Cajamarca Gregorio Santos, procesado por corrupción; David Sánchez Manrique, “Loco David”, igualmente sentenciado por el homicidio de Oyarce; y un viejo amigo, el exalcalde de la provincia del Santa Luis Arroyo Rojas, quien ha recibido una condena de 15 años de prisión efectiva por colusión en enero de este año.

Es la primera vez que Álvarez concede una entrevista periodística desde que fue apresado. “Me trajeron aquí para que no hable, pero ya es hora”, dice.

EL AMIGO. “Estoy preso por orden de Ollanta Humala”, arguye César Álvarez. “Humala ha olvidado que yo colaboré intensamente en la campaña política que lo llevó a Palacio de Gobierno. Lo apoyé con logística y con muchas cosas más. El nexo entre ambos fue mi amigo Martín Belaunde Lossio”, sostiene.

“A Martín Belaunde Lossio -prosigue Álvarez- lo conocí en el año 2006. Él viajó a Chimbote y me propuso candidatear a la presidencia regional de Áncash por el partido de Ollanta Humala. Quería que sea el candidato nacionalista. Ollanta lo envió para que me convenciera, pero no acepté y decidí postularme con mi movimiento independiente Cuenta Conmigo”.

Según César Álvarez, Belaunde Lossio volvió a buscarlo en el año 2010. “Me propuso apoyarme en mi campaña de reelección. Con su productora televisiva, él trazó un plan piloto para demostrar que era un buen publicista”, afirma.

Ya para entonces Álvarez era acusado de fustigar a sus adversarios políticos, algunos de los cuales empezaron a ser asesinados sistemáticamente por sicarios.

Las denuncias en su contra fueron archivadas o prescribieron por la evidente influencia que este ejercía en la Fiscalía y el Poder Judicial, pero Álvarez pensaba que estas sindicaciones podían costarle la reelección.

Todo lo anterior es un extracto de la entrevista realizada por correo semanal, donde presenta fotos de Cesar Alvares con algunos kilos de menos.

La primer imagen es en el Penal y la  segunda cunado visitaba Pallasca